Estar presentes con yoga ¿Cómo?

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Presente en el aquí y ahora.

Estar presentes es un tema que nos es familiar a todos. Estar presentes en este preciso instante, en este minuto, en esta hora, en este día, en esta semana, en este mes incluso en esta temporada, a veces puede ser uno de los retos más importantes del yoga, de la meditación y de la vida.

En esta temporada cuando febrero ya está terminando, y marzo se acerca con la llegada del buen tiempo y la Semana Santa muy cerca, tiendo a estar planificando todo lo que haré en esos días; incluso organizando un viaje para ver a mi familia que hace 3 años que no visito. Me veo anticipándome a toda la excitación y ansiedad que esto me provoca. En lugar de estar disfrutando de la calma que me aporta una rutina y de disfrutar de estos días de estar en casa tranquila con mis horarios para practicar y meditar.

El yoga nos ayuda a explorar el momento presente.

Cuando practicamos sobre el mat, nos enfrentamos al mismo reto de estar presentes y no perdernos en listas infinitas de cosas que tengo que hacer. En nuestra práctica tenemos la oportunidad de cultivar la presencia que nos va a ayudar en nuestra vida fuera del mat. Estar conectados a la respiración es la herramienta mas poderosa para estar presentes. No existe la respiración futura o la respiración pasada, solo la que está sucediendo.

En una práctica de vinyasa se trabajan pequeños flows o secuencias de posturas uniendo el movimiento a la respiración para que la mente esté conectada a tu respiración siempre. Se incluyen una series de posturas de pie trabajando sobre los mismos grupos musculares que harán que nuestra atención este en el equilibrio entre fuerza y la capacidad de soltar y suavizar. Las posturas sentadas te llevarán a testear tu paciencia mientras percibes tu nivel de flexibilidad y las posturas más retadoras harán que tu concentración solo pueda estar en el momento presente.

Cuando lleguen tus posturas menos favoritas, toma respiraciones profundas, haz una pausa y observa donde está tu mente. Olvidandote por completo como crees que debería ser esa postura y concentrándote en alargar las respiraciones , las pausas y encontrar esos pequeños cambios que te ayudarán en tu relación con esas posturas.

Estar presente en tu mat durante toda la practica hará que tu experiencia sea más intensa tanto física como mentalmente.

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